FERRERE asesoró a Cruzimex en la negociación de los términos relacionados con la distribución de las marcas de Bacardi en Bolivia.

El asesoramiento se centró principalmente en cuestiones fiscales y aduaneras, así como en la negociación de términos específicos dentro del contrato de distribución y las operaciones locales.

Así, se atendieron los aspectos vinculados a la exclusividad, a la propiedad intelectual, a los objetivos y métricas comerciales, entre otros aspectos críticos que garanticen la adecuada representación y distribución de la marca en el territorio nacional.

A partir de estas negociaciones, que se oficializaron a fines de enero, Cruzimex se convirtió en el distribuidor autorizado de la reconocida marca de bebidas espirituosas.

El trabajo de FERRERE fue liderado por el socio Diego Villarroel y un equipo de profesionales que incluyó a Pablo Heredia, Mauricio Viscarra y Santiago Rodríguez.