Un trabajador solicita la revocación de la sentencia de primera instancia en la que se determinó que el trabajador incurrió en las causales de despido con causa por injuria y pérdida de confianza por difundir información sensible de la empresa. El trabajador argumenta que la causal de injuria solo resulta aplicable en tanto un empleador es una persona física, y la causal de pérdida de confianza no es aplicable puesto que el trabajador no ocupaba un puesto de dirección, fiscalización o vigilancia. 

El Tribunal de Apelaciones determinó que corresponde confirmar la sentencia recurrida puesto que se demostraron las causales injuria y pérdida de confianza. Sobre la causal de injuria, se determinó que la causal es aplicable tanto a empleadores que sean personas físicas como jurídicas. Sobre la causal de pérdida de confianza, se consideró que resulta aplicable atendiendo a: (i) el salario que ostentaba la trabajadora era superior al mínimo legal; (ii) por el cargo que ocupaba accedía a informaciones sensibles o confidenciales, lo cual se evidencia por tener contacto directo con profesionales abogados representantes de la empleadora; y, (iii) el contrato de trabajo presentado contenía una cláusula de deber de reserva respecto cuestiones comerciales, técnicas y administrativas.