Las empresas deben profesionalizar la gestión que realizan en el ámbito de la seguridad laboral para mitigar los riesgos de accidentes de trabajo, pero también para documentar los procesos internos que la empresa cumple de forma de minimizar su exposición ante la Administración o la Justicia Penal, señaló Verónica Raffo, socia de FERRERE, durante una conferencia organizada por la firma sobre la aplicación de la ley de Responsabilidad Penal Empresarial, que convocó a más de 200 personas.

"Es clave que las empresas conozcan las normas de salud y seguridad que rigen su actividad, sensibilicen y capaciten a sus empleados, evalúen sus conocimientos, elaboren protocolos y planes de seguridad, controlen su cumplimiento y apliquen sanciones cuando sea necesario. Pero, además, es preciso que realicen todas estas tareas de una manera sistematizada y documentada”, afirmó Raffo. De esta forma, estarán contribuyendo simultáneamente a reducir los índices de siniestralidad y a contar con las pruebas necesarias de su proactividad y cumplimiento en un eventual proceso penal. “Porque no basta con serlo, también hay que parecerlo", opinó.

‎En el encuentro, que se llevó a cabo en el Edificio FERRERE, también participó el Inspector General de Trabajo y Seguridad Social, Juan Andrés Roballo, quien señaló que la responsabilidad penal por los accidentes que sufran los trabajadores en el ámbito laboral o por su exposición a situaciones de peligro podría recaer en integrantes de toda la cadena de mando de las empresas. Por lo tanto, podría determinarse que la responsabilidad penal corresponde a empleados de las firmas.

Acceda a la noticia completa en la publicación de origen.