Las regulaciones ya existentes en materia de protección y control ambiental son una plataforma que permite que la identificación del país como “Uruguay Natural” vaya de la mano de un mejor funcionamiento de los grandes proyectos que se vienen instalando en el Uruguay hace un buen tiempo, y que seguirán llegando.
Este fue el eje central de la presentación del abogado experto en medio ambiente Julián Ruiz, del estudio FERRERE, quién expuso en el foro “CIENCIATK – Uruguay: ¿País natural?”, organizado por el Centro Cultural de España, donde afirmó que “el concepto Uruguay Natural en nuestro derecho se encuentra en construcción al igual que el de la marca país ‘Uruguay Natural’”. Ruiz dijo que “Uruguay circula en el camino correcto para que estos conceptos se integren de la mejor manera con proyectos de inversión ya existentes y por venir. Uruguay Natural es, justamente, lo que les permitirá a estas iniciativas ser y hacer de la mejor manera en nuestro país, en un marco de normas ambientales exigentes y controles que deberán ser igualmente estrictas”, sentenció.
El especialista comentó también que ya existen casos en el país, como por ejemplo en la industria de la celulosa, cuya operación está sujeta a los más altos estándares de regulación y de control, y agregó que “reglas similares en cuanto a exigencias y garantías deberán aplicarse a nuevos emprendimientos”. En este sentido afirmó que “nada hace pensar que Uruguay sea menos natural por incluir grandes proyectos industriales sustentables en sus tres ejes: económico, social y ambiental”.
Además de explicar por qué el concepto no está contrapuesto a los nuevos proyectos, Ruiz habló también de que “hay que tener cuidado y no hacer foco solamente en lo que puede llegar al país”. En este sentido, explicó que “aunque Uruguay no aceptara ninguna inversión industrial nueva, el concepto de “natural” como idea en construcción, puede verse afectado, por ejemplo, por indicadores que tienen que ser mejorados, como la gestión de los residuos en las ciudades".
Finalmente, el abogado de FERRERE enumeró, a su entender, las cosas que están en el debe en esta materia. Habló de normas ambientales para el aire, sustancias peligrosas, residuos sólidos industriales y electrónicos, y resaltó la importancia de generar más incentivos fiscales para los emprendimientos sustentables, así como mayor asignación presupuestal a los aspectos ambientales, para que redunde en un fortalecimiento institucional buscando mejorar las capacidades técnicas y de control ambiental.