Si bien en Uruguay se está notando un claro enfriamiento de la economía a nivel del PBI, la inversión se mantiene fuerte. El 2013 fue otro buen año para FERRERE Abogados en sus tres jurisdicciones: Uruguay, Paraguay y Bolivia, lo cual ratificó una tendencia de re-aceleración de la tasa de crecimiento que ya lleva varios años. “Es la combinación de un fuerte desempeño en su grupo de financiamientos y de litigios y arbitrajes, además de los sectores tradicionales de bancos, fusiones y adquisiciones, corporativo general, inversión extranjera ‘green field’, laboral, tributario, IP, y otros”, según especificó a Empresas y Negocios Andrés Cerisola , socio director de FERRERE Abogados.
En Paraguay, segunda jurisdicción de la empresa, hay un ciclo de expectativas positivas tras el cambio de gobierno, con lo que FERRERE está en un excelente momento, con liderazgo, en ese caso, de las áreas de financiamiento y fusiones y adquisiciones, dijo Cerisola. Añadió que incorporaron en Paraguay dos nuevos socios en un año, una señal clara de la tendencia que vive esa oficina.
En Bolivia, la tercera jurisdicción, tuvieron un 2013 con una de las tasas de crecimiento mayores de la historia de FERRERE que, por muy poco, no llegó al 100%. “En parte eso es posible porque nuestra oficina de Bolivia es menor que la uruguaya, pero de cualquier forma son tasas que hablan por sí solas”, puntualizó el experto.
Por lo tanto, se podría concluir que el 2013 fue un año muy positivo para la organización. Pese a esto, en el primer semestre tuvieron una presión muy fuerte del tipo de cambio que generó desafíos a nivel de margen de contribución. “Felizmente, el segundo semestre nos dio un pequeño respiro en esa materia, pero la renuncia del gobierno a los instrumentos no monetarios de desindexación por ideología y, por ser un año prelectoral, nos preocupa por la incertidumbre de un tipo de cambio que haga competitiva la economía uruguaya”, agregó.
El primer semestre de 2014 se prevé muy bueno para FERRERE. Debido a su modo de funcionamiento, ya cerraron su año fiscal y de planificación a junio, y a esta fecha se puede predecir que será un período excelente. “Es difícil proyectar más allá de esa fecha, en especial siendo un año electoral en Uruguay, sumado al contexto negativo en Argentina, Brasil, Venezuela, India y, en general, en el mundo emergente”, opinó. Según Cerisola, el gobierno uruguayo también está comenzando a dar señales negativas a los inversores, especialmente en estos tiempos, y el decreto de las farmacias es solo un ejemplo de una tendencia muy peligrosa, que afectará inmediatamente la propensión de los fondos de private equity a invertir, y con algo de demora y menor impacto probablemente también la de los estratégicos.
Asimismo, Estados Unidos comenzará a ajustar su política monetaria en el segundo trimestre de 2014, lo que repercutirá inmediatamente sobre el costo del financiamiento, la inflación y el tipo de cambio en Uruguay. Dado el peso que la inversión tiene sobre su actividad, todo lo anterior obliga a ser mucho más prudente de lo que fui en la planificación los últimos años, afirmó.
“La contrapartida es que, cada año que pasa, la firma está más consolidada estratégica y operativamente, y eso es un contrapeso. Pero al final del día siempre es más fácil surfear un buen momento, que ganar mercado en una torta que no crece o se achica”, dijo. Explicó que en Paraguay y Bolivia es una situación diferente, y seguramente llegarán a su proceso de planificación en 2014 con objetivos de crecimiento ambiciosos.
Consolidar su liderazgo
Hoy en día, el proyecto estratégico principal de la firma es consolidar su liderazgo en Paraguay y Bolivia, y Cerisola está trabajando activamente en un proyecto para lograr la apertura de una nueva oficina en Ecuador. “En Uruguay nuestros dos proyectos estratégicos están en fortalecer nuestra diferenciación en sectores donde hoy somos líderes indiscutidos y hacen a la esencia de nuestra rentabilidad, realizar las transformaciones necesarias en nuestros procesos que nos permitan dar un servicio diferencial pero ser competitivos en los sectores donde pugnamos con otras firmas, y tal vez hacer un movimiento agresivo en uno o dos sectores donde queremos consolidar nuestro liderazgo”.
El abogado espera, de aquí a cinco años, dejar una firma que sea líder indiscutida en las cuatro jurisdicciones pequeñas de América del Sur.
Artículo publicado en semanario Crónicas, en edición del viernes 24 de enero de 2014.